Esta mañana se ha llevado a cabo una visita a las siurelleras de Ca Madò Bet y Can Bernadí Nou, y al artista de piezas de vidrio, Mirenchu ​​Beascoechea, para conocer el trabajo que hacen en el taller y cómo mantienen viva esta tradición ajustándose a las nuevas tendencias.

El director del Museo Nacional de Cerámica, Jaume Coll, ha visitado el municipio de Marratxí y ha asegurado que «los siurells y las greixoneres son la seña de identidad mallorquina con respecto a la cerámica». Coll ha añadido que en el museo tienen siurells, por tanto, una pequeña parte de municipio, ya que como ha dicho, «Marratxí es el símbolo de la cerámica mallorquina por excelencia».

Por otra parte, el alcalde, Jaume Llompart, ha asegurado que está muy contento de que personas importantes en el mundo de la cerámica como Jaume Coll, visiten el municipio y tengan interés en ver el trabajo que se realiza, por ejemplo, en una siurelleria. Llompart ha destacado que «son muchas las modalidades de cerámica en Marratxí, y una manera de promocionar y ayudar a los artesanos locales es obsequiar en actos con siurells, algo que también les propongo a otras instituciones».

La visita también ha contado con la presencia del director insular de Artesanía, Pere Ferrer, asegurando que “la divulgación de nuestras tradiciones es uno de los objetivos fundamentales que tenemos en el ámbito institucional, la difusión de este patrimonio cultural debe estar al frente de nuestras campañas”. Ferrer ha finalizado diciendo que «el Consell debe ser el primero que cuando tengan que dar un detalle a otras instituciones, o a los ciudadanos, lo haga con la forma de estas figuras tradicionales, como los siurells».